Subido en lo alto de un árbol
a un niño me encontré,
quería coger la Luna
que vio al anochecer.
¡Qué inocente, la criatura!
pues él no se percató
que la Luna, como la noche,
al amanecer se esfumó.
Yo quise explicarle
que eso es natural
sale la Luna de noche
y en el día se va.
Pero no fue cosa fácil
porque él me rebatió
la Luna siempre está presente,
sólo que la tapa el sol.
Cuánto saben las criaturas,
yo asombrado me quedé,
él sabía que allí estaba la Luna
aunque no la pudiera coger.
Asombrado de su razonamiento,
yo cabizbajo me marché
pues tiene razón el crío
no siempre hay que ver para creer.
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Autor: Tony CosIm
Torrevieja - España
Derechos de Autor Reservados
28 - 1 - 2019
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Autor: Tony CosIm
Torrevieja - España
Derechos de Autor Reservados
28 - 1 - 2019
Mi nieto me dio una lección.
ResponderEliminarLa luna y el sol tapándose están,
ResponderEliminarel mar con sus dos orillas contemplándola está,
según en que orilla este el niño
Luna o Sol verá.
No es lo que tu escribes pero me salió tal cual.
Saludos Tony
Elena, las cosas son tal cual uno las ciente y no hay mas razon que la que te manda tu corazon.
ResponderEliminarGracias Amiga
De nada Tony
ResponderEliminarFelicidades!!!bonito poema, y es muy cierto, no siempre se ve, en lo que se cree. Un abrazo poeta, y feliz viernes.
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