Siempre Fidelidad y Amor

Me dijiste ¡Te quiero!
No, escuché tus palabras,
más yo sabia que su tono,
era de amor muy…

Tu al ver mi indiferencia,
ex clamaste: ¡Eres el primero,
que rehúsa mi cariño,
y yo de verdad lo quiero!

Me trataste de poco hombre,
por no tocarte y amarte,
de mi pensaste mil cosas
en tu ambición delirante,
porque el hombre que querías,
de ti, no se hizo amante.

Hablaste sin recato
mil palabras difaman tés,
más yo no te puedo dar
el cariño que me pides,
pues infiel jamás seré
para esa santa mujer,
que un día al altar lleve.


2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar