Sus ojos de amor
por amor morían,
y no encontraba al galán
que en sus sueños veía.
Dime tu, ¡Príncipe de mis sueños!,
¿Dónde están las caricias
que te pide mi cuerpo?
Pero un buen día
en un bus,
Llego su trovador
declarándole, amor.
Amor de media noche
siempre a media luz,
cuatro caricias divinas
un romántico beso,
y unos dedos acariciando…
Noches sin final,
días intensos,
el amor esperado,
y por fin el amor soñado.
Señor, señor, repetía la doncella
porque me hiciste esperar tanto
y no disfrutar de este encanto.
Así es el amor…
Cuando llega, llega…
Y no te opongas a el
de ninguna manera.
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Autor: Tony CosIm
Torrevieja - España
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2 -2 - 2023